lunes, 17 de mayo de 2010

En el medio

El problema de la vida mediatizada es que ni Brad Pitt se parece a Brad Pitt.
Me levanto y cuando me miro al espejo me quiero matar porque no soy la de los 20 ¿Cómo hace Jennifer Aniston para estar tan divina con 40? Ya sé, yo sólo la veo en películas o en fotos de revistas. Ya sé, que no es sólo la gimnasia, las cirugías y las cremas carísimas, ya sé que también están las luces, el enfoque al mejor perfil y el photoshop. Ya sé pero no sé.
De alguna manera, el contrato tácito que hacemos todos los días con los medios de comunicación que nos acompañan nos deja claro que casi todo es mentira y sin embargo nuestra parte es creer. Y creemos aunque sabemos que es un engaño.
Es rara esta disociación entre el creer y el saber, ¿no?
Por otra parte, los ciudadanos del mundo vivimos la encrucijada planteada entre los Estados (algunos) y los monopolios informativos. En Argentina, por ejemplo, están claros los discursos, para el gobierno está todo bien y para los monopolios está todo mal. Cada uno defiende su interés de conservar el espacio de poder que hoy ostenta. La cuestión es que, en el medio, a cada uno de nosotros nos cuesta pensar. Tal es la invasión informativa (o desinformativa en muchos casos) que uno se aturde. Además están las expectativas, acostumbrados a las películas de horror con un Freddy Krueger totamente malo o a las de Palito Ortega, donde el mundo es de color rosa como la sonrisa de mamá. Todo tiene que estar en valores absolutos: como Jennifer, hermosa por donde se la mire, sin un ápice de imperfección.
Con este atributo de la sociedad es con el cual opera la oposición. Se detiene en las arruguitas, en el cabello despeinado, en el mal aliento matinal de las políticas sociales implementadas para descalificarlas y la gente mediatizada acepta que está mal. Al fin y al cabo todo tiene que ser maravilloso, sin medias tintas.
Lo que es yo termino por resignarme y acepto que el veranito también viene con días insoportables, el hombre al que amo tiene tardes en que prefiere al fútbol antes que a mí y que yo misma soy mejor que antes, aún con patas de gallo y alguna que otra cana que no hay tintura que tape.

lunes, 10 de mayo de 2010

Milico

Últimamente el reconocimiento de la importancia de la utilización de las palabras está en boga. "Dictadura", "nazismo", "miedo" tan en boca de periodistas y políticos de la oposición son cuestionadas por periodistas y políticos oficialistas, y no es para menos ya que los tres términos revisten valores absolutos, no hay segundas lecturas posibles (especialmente en los casos de "dictadura" y "nazismo") y desde ya su aplicación, más allá de demostrar la disconformidad de algunos con el actual gobierno, pone de manifiesto la búsqueda de los opositores de instalar el terror a través no sólo de la exageración si no directamente de la mentira.
Por lo general, las palabras de acuerdo a su contexto tienen diferentes significados, sin embargo hay palabras de tal peso que encierran el contexto en sí mismas. Lo mismo que con los ejemplos anteriores sucede con el término "milico".
Hoy, venía en el colectivo y un hombre me dijo de muy mala manera que no le apoyara mi bolso (él iba sentado). En primer lugar yo estaba parada a una distancia prudencial del asiento, en segundo, el señor, corpulento él, desbordaba de su lugar, y en tercero, si me lo hubiese pedido amablemente es seguro que yo me hubiera corrido y hasta le pidiese disculpas; como no fue el caso le contesté en buenos términos y no me moví lo que alteró un poco más al ya alterado señor. La cosa no pasó a mayores y se dio por terminada cuando dije algo así como "Milicos, se los huele a 15 cuadras".
La anécdota es que, después de un rato, el tipo se dio vuelta (yo ya me había sentado) y me pidió disculpas por haberse calentado. Con las disculpas aceptadas continuó: "... Y no soy milico, soy analista de sistemas".
Sin dudas, "milico" es un término peyorativo tanto para quienes lo son, como para los que están en las antípodas. Otra palabra que no necesita adjetivos porque se explica a sí misma.

viernes, 30 de abril de 2010

La picadora de carne

Y sí. Las cosas se dieron tal y como las pensé. Este año el Grupo Clarín no me contrata para la labor que vengo desarrollando desde hace más de cinco. La razón (o excusa) es que hay un nuevo Gerente y que éste trae a su gente.
Por otra parte siempre fue notorio que nunca me puse la camiseta y que no soy el perfil más ortodoxo para la corporación, pero este año, autoconvocatorias y marchas mediantes, blogueando y opinando en cuanto foro pude, quedó claro que considero a Clarín un monopolio. Y a los monopolios no les gusta que se los califique de esa manera.
Así como me hago cargo públicamente de mi pensamiento al respecto, me hago cargo de sus consecuencias. Menos para facturar, desde ya, pero menos sentimientos encontrados también.
Aunque mi actividad no se desarrollaba a nivel periodístico y mi ideología no estaba en juego en el contexto en que desarrollaba mi labor (de hecho, hasta afirmo que lo que hacía tenía cierto impacto social con el cual acuerdo) me venía preguntando ( y no desde ahora, si no desde casi el comienzo de mi trayectoria en el Grupo) si debía o no continuar.
Es que Clarín es una picadora de carne que más allá del análisis político al que está siendo sujeto y objeto en los últimos tiempos siempre afectó a sus empleados.
Conozco gente que abandonó su vocación periodística para volcarse a sectores comerciales, gente que perdió a sus familias en pos de una zanahoria que nunca alcanza, gente que pensaba de una manera y que ahora piensa desde las antípodas.
En fin, lo mío es nada, una pelusa en esta frazada gigante que hay que sacudir para de paso sacudir conciencias.

martes, 20 de abril de 2010

El Puente

Muchas veces, durante muchos años, crucé sólo por un fin de semana el puente. Queda a 230 km de la Capital y me llevaba a un lugar, para mí, casi paradisíaco.
Ahora, desde que se instaló Botnia, asambleístas, defensores del medio ambiente, me impiden llegar a Fray Bentos y su balneario Las Cañas. Hoy, después de muchas idas y venidas, la corte de La Haya dictaminó que si bien Uruguay incumplió con los tratados sobre el río, la pastera puede seguir funcionando ya que no se demostró que contamine. El fallo es inapelable y definitivo.
Entonces, lo que queda, es saber cómo van a reaccionar los asambleístas. Si finalmente van a desistir del bloqueo o van a insistir a pesar de que la medida no sólo no fue efectiva para lograr su cometido (que la fábrica se cierre) si no que además coarta la libertad de circular.
Claro que no me gusta la pastera, posiblemente contaminando las aguas, y seguramente contaminando el panorama visual. Claro que creo en la importancia y el poder de las manifestaciones ciudadanas. Está claro. Sin embargo me pregunto hasta dónde puede llegar el derecho legítimo de reclamar cuando la manifestación del reclamo socava a su vez otros derechos igual de legítimos y valederos.

martes, 6 de abril de 2010

La nota

En Diciembre de 1977, Clarín publicó una nota en la cual, después de aclarar que los cronistas llegaron al lugar con absoluta discrecionalidad, describía un centro de recuperación de subversivos que se habían entregado a las FFAA voluntariamente.
La descripción se ajustaba a un impoluto paraíso terrenal, de paredes blancas, rodeado de jardines (un kitch milico si lo hay) donde los subversivos aprendían a relacionarse de manera saludable con la comunidad. https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihIoAYzAOFQd8N7_Pu-3FwfkRDqqlEAL1U6cXfYKZVUoIXUanJMO9QNB-t9cjf1yT2JjMKrBh5JiXrFdl-RRF2onwxpInr4Y-KmQ_27JaGZK1iL9B6KoX1G1szfzbhhxLhLR7OFv82xXs/s1600-h/clarin_1977.jpg
Hoy, 33 años después sabemos con absoluta seguridad que esto es mentira. MENTIRA.
También sabemos que esta mentira no es una cualquiera y que puede considerársela parte de una estrategia cómplice y hasta participante necesaria del régimen asesino que nos gobernó entre el 76 y fines del 83.
La nota no estaba firmada por ningún periodista en particular. Era de la "Redacción de Clarín". Es comprensible que muchos trabajadores del diario de aquella época no hayan salido a desmentir la publicación. En definitiva corrían peligro sus vidas.
La cuestión es, ¿qué es lo que impide hoy, en plena democracia, a los cronistas de Clarín denunciar las barbaridades que allí se publican?
¿El temor a perder el trabajo?
¿Miedo a alguna represalia más tremenda que la de perder su puesto?
O lisa, y llanamente, ¿la preponderancia de sus intereses personales por sobre la ética?
Me encantaría que más temprano que tarde, algún periodista del monopolio se anime y ponga la nota, desmarcándose de tantas mentiras.

lunes, 29 de marzo de 2010

Estos dìas

Comencè mis vacaciones. Son unos dìas nada màs pero los estoy aprovechando.
El mièrcoles, para empezar, fui a la ESMA y màs tarde a la Plaza de la Memoria. Me sorprendieron las dos convocatorias. La primera porque habìa mucha clase media urbana atenta a las palabras de la Presidenta. La segunda por la cantidad de gente (no coincido con el nùmero difundido en todos los medios, 40000 personas, creo que fuimos màs circulando, entrando y saliendo desde las 13 hasta las 21).
Para empezar estuvo bien. Aunque no cambiè de aire porque la plata no me da, estoy cambiando sensaciones, renovando expectativas.
Es bueno lo que està pasando. Es bueno que la gente discuta, participe, confronte. Es bueno tambièn que reconozca lo bueno cuando sucede y que grite cuando alguien se lo quiere sacar.
Los Derechos Humanos son nuestros. Son para nosotros. Màs allà de lo ùltimo en discurso hegemònico, eso de que "los Kirchner se apropiaron" de ellos, la sociedad empieza a reconocer que es en estos últimos gobiernos que se empieza a condenar a los genocidas. Y eso tiene un valor.
Una amiga me preguntaba por què Cristina y Nèstor despierta en tantos un odio tan visceral. Me dejò pensando.
El 24, recordando el golpe de Estado, hubo algo nuevo. Se cambiò el relato que històricamente venimos manejando. Se hablò de un golpe cìvico- militar y no militar exclusivamente.
Pensè, si la economìa macro funciona, si las instituciones estàn ahì, en la puja constante pero estàn, si respiramos libertad como nunca antes, si tenemos el reconocimiento de nuestros avances incluso desde la mirada forànea, por què los atacan tanto.
Por un lado la Ley de Medios, claro està, afectò los intereses de grupos muy poderosos, pero hay algo màs.
No serà que cuando termine de enjuiciarse a los militares van a empezar a caer tambièn los civiles poderosos, còmplices y responsables de los crìmenes de lesa humanidad que nos asolò en los 70 y principios de los 80.
Pasan cosas en estos dìas. Son dìas que seguro pasan a la historia.

viernes, 19 de marzo de 2010

Señales

De chica quería ser como Indiana Jones. De hecho pensé en estudiar arqueología, sin embargo, después de no pocas vueltas, opté por Comunicación. Semiología y semiótica me atraparon pero no alcanzaron para decidirme a terminar la carrera y me pasé al profesorado de castellano, literatura y latín que en el fondo, ahora lo sé, son lo mismo. Todo se trata de palabras.
Las palabras como medio para comunicar realidades o ficción. Palabras como canales de la expresión del mundo.
El mundo nos habla y está en nosotros el escucharlo. O no.
Finalmente no me gradué (como verán soy bastante inestable y vaga) pero adquirí algunas herramientas que me sirven para lo cotidiano.
De una manera u otra mi primera vocación, esa de desenterrar signos como Indiana, afloró a lo largo de mi vida adulta en la medida que fui desarrollándome como ser pensante.
En lugar de la tierra lo que excavo son las noticias. En lugar de palas, lo que utilizo son mis ideas.
Porsupuesto que mis análisis, siempre arbitrarios y sin ningún rigor científico, son mucho más endebles que los que devienen de descubrimientos concretos, como una vasija o una espada o una calavera.
En estos días me sorprendí leyendo que Francisco De Narvaez afirmaba que él no hubiera negado el pliego de Marcó Del Pont. Después, (esta noticia fue más difundida) se habló de ciertos resquemores en su relación con Macri.
Ayer, de casualidad porque no tengo cable, alcancé a ver una nota de Canal 24 en el Mercado Central. El eje era los precios bajísimos de la mercadería, la gente contenta comprando.
¿No los deja, al menos, pensando? El canal de De Narvaez mostrando algo positivo que sucede durante esta gestión... De Narvaez cortando con su socio...De Narvaez aceptando la Presidenta del BC, la objetada por tantos otros...
Me parece que se vienen alianzas. Es difícil que el Colorado acceda a la Presidencia; Buenos Aires es un sueño más realista. El oficialismo necesita de todo el bagaje comunicacional para emprender la carrera electoral, ya tiene el 7, algo en el 9 y si suma a América...
No sé, tal vez estoy muy equivocada y hay maniobras mucho más oscuras que ni con excavadoras súper potentes uno puede, si no desenterrar, al menos vislumbrar.
Son sólo señales ¿Ustedes cómo las interpretan?

miércoles, 17 de marzo de 2010

Los pescados

La presidenta sugirió que consumamos merluza porque, por ahora, no se puede controlar el precio de la carne vacuna. Porsupuesto líderes de la oposición encontraron eco en los grandes medios para criticar dicha sugerencia.
Así como antes la prensa generalizada se había burlado de la exhortación presidencial a comer carne de cerdo, ahora se burlan por el pescado.
El problema es el precio de la carne de vaca, no importa si se la puede reemplazar por alimentos más baratos. No importa la solución. Acá, siempre lo importante es el problema.
¿Pero cuál es el problema?
Si el Gobierno a través de su Secretario de Comercio intenta limitar el avance del precio de la carne está coartando el libre mercado y es denostado en todos los titulares donde, por ejemplo, se habla de cierre de exportaciones.
Ahora bien, si el Gobierno propone una alternativa viable también es denostado, o al menos burlado.
El problema, el verdadero problema somos nosotros, los ciudadanos: carne de cañón.
Si entendemos la teoría básica de libre mercado, sabremos que se rige por la oferta y la demanda. A mayor oferta y menor demanda, menor precio , y viceversa. Es decir: a mayor demanda, menor oferta, mayor precio. Sí, sí, cuanto más consumamos un producto más caro va a resultar.
¿Entonces por qué se burlan de la presidenta cuando sugiere que se consuma menos carne vacuna para bajarle el precio?
La cuestión está en el otro índice de la fórmula. Lo que quiere el sector agropecuario es que se mejore la oferta. Es decir, que haya más carne en el mercado para equilibrar la demanda y por ende el precio.
Entonces el Gobierno, siempre atento a los requerimientos, propone cerrar las exportaciones. De esta manera la carne se queda en casita, hay mucha más carne en el mercado y Doña Rosa contenta.
Los que no se quedan contentos con esta solución son los productores. No, no, no. Por qué vender su carne a precio $ si afuera puede venderla a valor dólar. No. Lo que quieren los señores es que el Estado subvencione la producción de la carne (que por otra parte ya cuenta con subsidios) para producir más y que el excedente de producción se quede en nuestro país.
Todo muy lindo...¿pero no era que bogan por el libre mercado?
Al final, los del medio siempre somos nosotros que no asumimos concientemente nuestro lugar. Si algo es caro no hay que comprarlo y listo (especialmente si hay cómo reemplazarlo). El problema no es la merluza, si no nosotros que en esto del mercado no nos movemos como peces en el agua si no sólo como pescados.

lunes, 8 de marzo de 2010

Día de la Mujer

Una compañera de trabajo me dice, ¿qué opinás sobre el Día de la Mujer?. La frase me sorprende y cuando estoy por preguntarle qué me quiso decir continúa: "¿No te parece que es machista?".
Entendí. No hay día del varón. Hay día del animal. Hay Día de la Mujer.
Me quedé pensando en el por qué de los "Días de" y llegué a la conclusión de que se mantienen vigentes como recordatorio de lo que todavía nos queda por resolver como sociedad. La lista es inmensa y no alcanzan los 365 días del año. "La mujer" al menos ocupa éste. El 8 de Marzo. "El animal", el 29 de Abril.
Ahora bien, ¿por qué las mujeres estamos al mismo nivel que los animales, las enfermedades y el medio ambiente? ¿Por qué esta cosificación que hace que todavía se discuta el derecho al aborto como se discute la necesidad de la castración de los perros y gatos?
Desde la tapa, Página12 me acercó una respuesta.
Después de la distribución de comisiones que hizo en días pasados "la oposición" en el Parlamento, distribución que recuerda más bien a la repartija de un botín secuestrado por piratas, Liliana Negre de Alonso quedó al frente de la Comisión de Legislación Nacional. La Senadora, entre otras cuestiones, fue la única que votó contra la educación sexual, defendió a Cecilia Pando (otro triste exponente femenino) y se opuso a la renovación de la Corte con un claro argumento antiabortista.
¿Si es machista que haya un "Día de la Mujer"?
No lo sé.
Lo único que puedo afirmar es que las mujeres no necesitamos de los hombres para jodernos la vida. Con algunas de nuestras congéneres nos basta.

jueves, 4 de marzo de 2010

Un cuento

En Argentina, en 2003, un gobernador de una provincia, al sur del sur, se invistió como Presidente de la República. Lo hizo con el apoyo de un 23% efectivo del electorado, aún después de haber sido derrotado por un ex presidente que en la primera vuelta electoral obtuvo un 25% de votos. Su buena estrella se debió a los tejes y manejes de su principal mentor en ese momento, que paradójicamente había sido vicepresidente del oponente, que logró que todo el arco político apoyara al casi ignoto gobernador ¿El argumento? No había que dejarle chance al expresidente; él había dejado al país al borde de la miseria económica y moral.
Aunque el gobernador sostenía una militancia claramente de izquierda, el establishment confió en que éste no mordería la mano de quien le dio de comer y sería un fiel lacayo de su mentor.
Pero como de lo que estamos hablando es de política, el gobernador devenido presidente decidió poquito a poco actuar por su cuenta y trabajar por los ideales de su juventud. La gente no salía de su asombro, cómo se había animado a desarticular a la Corte obsecuente, cómo a enjuiciar a los indultados, cómo a descabezar a la Policía. Todos se respondieron que la culpa era de la bruja.
La bruja en cuestión, linda como una hada, era una senadora de mucho carácter que no por casualidad era la esposa de este ahora exgobernador y actual presidente, que según las malas lenguas lo tenía cortito.
Tan bruja, tan bruja era que mediante pócimas encantadas logró sacarse del medio al petimetre para investir ella misma la banda presidencial.
Todos la miraban con desconfianza y estaban al acecho. La bruja malvada no tardó en demostrar su terrible perversión: al poco tiempo de asumir decidió cobrar una renta a las ganancias extraordianarias para generar políticas de Estado en beneficio de los pobres.
Sin embargo, por esas cosas de la vida, tamaña desubicación no se le podía atribuir a una mujer por más bruja que fuera, así que todos decidieron hacer revisionismo histórico para descubrir la verdad, que no era otra que la siguiente: al final el malo, malo de la historia era el gobernadorsucho devenido en presidente, devenido en expresidente, devenido en primer damo.
Hasta aquí se podía llegar. Un paso más y los preceptos de nuestra sociedad se perderían para siempre. Así que manos a la obra, todos se decidieron por hacerle la vida imposible a la bruja, que al final no es tan bruja, si no una pobre mujercita manejada.
Nuestra historia, que no tiene fin, hoy escribe un capítulo que daría risa si no fuera para llorar por que resulta que...
el antiguo mentor que sangra por la herida, se alió con el antiguo expresidente, contra el que operó anteriormente, pero del que anteriormente a anteriormente había sido vicepresidente, y éste a su vez acordó con todos los que se le pusieron en contra, por su gobierno nefasto, para eliminar cualquier posibilidad de que la bruja, perdón, la mujercita manejada, (y en realidad, para mí, una verdadera hada) gobierne de manera tal que nuestro país sea al fin un país en serio y no el cuento de terror al que los jodidos de siempre quieren acostumbrarnos.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Trolls

Resulta que soy novata en esto de los blogs. Resulta que hay códigos que desconozco y todo (o casi todo) me parece novedoso.
Además de escribir acá, participo con mis comentarios en otros blogs e intercambio opiniones con otros bloggeros.
Ayer, en uno de los blogs en los que opino, la administradora decidió borrar todas las entradas de un par de participantes que llevan la contra de manera permanente. La verdad es que me indigné, lo sentí como un abuso de autoridad y de alguna manera me solidaricé con los censurados.
Otro participante, muy amablemente, me introdujo en un vocablo desconocido por mí: trolls.
Parece ser que los trolls son aquellos que entran a los blogs sólo para contrariar, desviar el tema a tratarse y generar disputas entre los demás participantes.
Si bien debo reconocer que los personajes eliminados ayer se ajustan a la anterior definición, de todas formas no me quedé conforme con la decisión de censurarlos.
Es que, desde mi punto de vista, los trolls no están sólo en Internet, si no más bien en todos los estratos de la vida y no creo que eliminándolos se eliminen también sus objetivos perniciosos.
Lo que sí, creo, en cambio, es que el trabajo válido es aquel que apunta al desarrollo del pensamiento individual (ojo! no individualista!), sustentado en argumentos no falaces. De esa manera, cada persona decide cómo responder a los ataques y también si responde o no.
El paternalismo de un administrador, en cualquier blog, intentando evitarnos una molestia, a la larga nos quita la posibilidad de desarrollar en el ámbito virtual una herramienta altamente necesaria en el mundo real.

martes, 2 de marzo de 2010

La Política III

Ayer nuestra Presidenta dio un claro ejemplo de lo que, para mi entender, es política. Al final de un excelente discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso informó sobre la derogación del DNU que involucraba al Fondo del Bicentenario, y las tan mentadas reservas, combatido por la oposición, a la vez que presentaba ante los legisladores dos nuevos decretos que permitieron el pago de los compromisos argentinos y una caja de cuatro mil millones de pesos para cumplir con obligaciones de la deuda.
De manera absolutamente legal, CFK esquivó las zancadillas de sus detractores y consiguió su objetivo. Eso es política.
Estarán, seguramente, quienes verán la maniobra como una muestra de falta de ética, bla bla, bla.
Sin embargo, siempre desde mi punto de vista, la misma política que permite que todo el arco opositor, que va desde un Giustiniani hasta un Reuteman, trabaje para no dejar representatividad en las comisiones legislativas a la que es por mucho la primera mayoría, la mima política que aunó contra el pago de la deuda externa con reservas federales a quienes argumentan la"ilegitimidad de la deuda" con quienes la fomentaron desde sus rediles, esa misma política ayer se puso del lado del Gobierno.
En fin. Touché.

viernes, 26 de febrero de 2010

Más de lo mismo

Siguiendo con lo que planteé ayer sobre mi perspectiva de qué es política, voy a compartir con Uds. una peli que vi hace unas semanas en la tele.
La cosa era así: Kevin Costner era un rescatista que dedicaba su vida a salvar a las personas en situación de desastre, inundaciones, desmoronamientos, etc. La cuestión es que un buen día en medio de un rescate se muere su compañero y el pibe queda shockeado por lo cual lo derivan a una escuela de rescatistas para que sea instructor. Allí brinda sus máximas a los estudiantes, muy en especial al chico lindo de la película, interpretado por el marido de Demi Moore, que pasa a ser su sucesor.
Entre las lecciones más importantes se encuentra la siguiente.
"Joe (o Jhon, James, o como sea) debes saber que nuestra función es salvar vidas. Lo difícil es cuando hay muchos para salvar pero tu tiempo y tus recursos son limitados. Es ahí donde debes elegir a quién salvar y a quién no". Por otra parte continuaba, "Y hay un momento en que lo que debes decidir es salvarte a tí mismo".
Máxima si las hay para aplicar al poder político.
Cuando ayer planteaba para qué quieren el poder nuestros políticos, la cosa venía por ahí. Mi pregunta, antes de votar, es siempre, ¿a quién va a querer salvar primero, este ñato? En función de lo que me contesto es que voto.
Por otro lado, y aquí está mi análisis de la última parte del consejo de Kevin, asumo que cualquiera que acceda al poder va a intentar sostenerse, aún a costa de la entrega de sus ideales.
Sin embargo no siempre veo esa falta de escrúpulos como algo negativo. Más bien, se me da por pensar que, si logra quedarse, tal vez pueda seguir actuando, utilizar el poder como medio de posibilidad y todavía obtener algunos de los logros que lo impulsó.
Y Uds. qué creen?

jueves, 25 de febrero de 2010

La Política

Hoy, algunos de los diarios más importantes del país se hacen cruces por la falta de quorum en el Parlamento para configurar las comisiones legislativas. Se utilizaron términos y conceptos como "extorsivo", "bloqueo" y "peligroso antecedente" sin recordar cuando, hace no mucho tiempo atrás, fue la oposición la que se levantó de sus estrados dejando sesionar sólo (o solo, como prefieran) al oficialismo. Sin embargo, en ese entonces, los títulos no fueron lapidarios para con quienes abandonaron su asiento en el Congreso.
¿Cómo es la cosa? ¿Está bien que se levante la oposición y está mal que lo haga el oficialismo?
Desde mi opinión la respuesta es: Nunca está mal. Esto es política.
La política, lejos de ser un campo de rosas, es un espacio de discusión, debate, negociaciones (y en algunos casos negociados) pero fundamentalmente es un espacio de construcción de poder.
Lo que nos queda por debatir a los ciudadanos comunes es para qué construyen poder nuestros políticos, ¿ construyen un poder que devendría en posibilidades para todos o uno prepotente que impondría su fuerza para someternos?
¿Qué posibilidades y qué imposiciones estarán defendiendo o gestando unos y otros?

martes, 23 de febrero de 2010

En el blog de Orlando Barone (www.orlandobarone.blogspot.com) hay una carta abierta en la que describe las diferentes formas de ser rehenes. El domingo me asaltaron y el episodio con resolución feliz (al menos para mí) me dejó pensando.
Si bien no me lastimaron en el momento del robo, y como bonus track recibí la noticia de que los asaltantes habían sido apresados y que mis cosas me iban a ser restituidas, no zafé de los pasillos laberínticos de la burocracia.
Primero tuve que ir a hacer la denuncia a la Comisaría. Después de recibir un llamado tuve que ir a buscar mis cosas pero todavía no estaban. Más tarde y luego de recibir un segundo llamado tuve que volver y me derivaron a "Judiciales" en la misma comisaría pero no sabían de qué les hablaba hasta que gracias a la buena predisposición de una agente ayudante llegamos a la oficina del Principal que sí estaba al tanto. Todavía me quedaba firmar la declaratoria de la restitución, cuestión que demoró más de una hora porque la única impresora disponible (que desde mi desconocimiento cibernético puedo casi ubicar en la misma línea temporal de una Atari) se trababa, recibir la notificación del juzgado pertinente para ratificar judicialmente mis dichos, notificación que el Principal se empeñó en hacerme personalmente ( fue una hora más de espera porque en la Comisaría, que sin dudas cuenta con excelente personal policial, también se había recuperado un auto robado y el Principal insistió también en hablar personalmente con los afortunados damnificados) y hacer al día siguiente (es decir hoy) mi declaración en Tribunales.
Es allí donde lo de "los pasillos de la burocracia" se hace gráfico, no porque hayan tardado en tomar mi testimonio o puesto algún obstáculo para hacerlo, si no por los pasillos mismos... llegué al juzgado correspondiente de casualidad y a fuerza de preguntar a gente que bien intencionadamente me llevó a buen puerto. En fin, una experiencia.
Sobre el final de mi audiencia escucho que, en la recepción de la Secretaría en la que me encontraba, una mujer lloraba clamando por un hombre, el cual presumí es empleado del juzgado. Al salir la encontré llorosa en el banco del pasillo y, prejuicio mediante, pensé: si yo, damnificada de una situación soy rehén de los protocolos que la Justicia con su burocracia me imponen, ¿cuáles serán las instancias opresivas que deberán vivir los familiares y amigos de personas, inocentes o culpables, que están detenidas?

viernes, 19 de febrero de 2010

Que posse el que sigue

Resulta que Abel Posse, ex ministro de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, firmó, en alguno de los pocos días de su gestión, una resolución que determina el cierre de 82 cursos de la escuela primaria para este nuevo año lectivo. La razón: la cantidad de alumnos inscriptos no justifica su conservación.
Al ser consultado, esta mañana por Horacio Embón en su programa radial, Posse reconoció la acción pero, sin embargo, no se hizo cargo de su responsabilidad y conocimiento cabal del hecho ya que afirmó que sólo refrendó lo que había dejado su predecesor.
Más allá de que desconocemos los criterios utilizados para tomar semejante decisión (en una ciudad donde justamente siempre es un problema conseguir vacantes para nuestros chicos) y que, al menos a priori, no me guste que se avasalle de esta manera a la educación pública, me pregunto: ¿es lógico que, en la misma ciudad, cuando los ciudadanos comunes cometemos alguna infracción - y me refiero a cualquier ciudadano, incluso alguno analfabeto que no siquiera haya podido acceder a la escuela del Estado cada vez más recortada- debamos atenernos a la ley escrita desde la presunción de nuestro conocimiento de la misma, que un funcionario público (o, como en este caso, y por suerte, un ex funcionario) se arrogue como defensa de su accionar el "no sabía lo que firmaba" porque suponía que estaría ameritado por el control del ministro que lo antecedió?
No quiero pegarle a Macri, vamos, que no es culpa de él si el gabinete que designa es de inoperantes...¿No?

jueves, 18 de febrero de 2010

Una de cal y otra de arena

Así como no me banco que diarios como La Nación y Clarín le tiren con artillería pesada al gobierno nacional, tampoco me cae en gracia que le peguen a Macri por las inundaciones del lunes pasado en la ciudad de Buenos Aires.
A ver. Macri no es santo de mi devoción y dudo que alguna vez lo sea (en principio porque no soy nada religiosa) pero de ahí, a dejar pasar a la hora de analizar lo acontecido el dato concreto de las no menos concretas inundaciones padecidas históricamente en la ciudad y la particular potencia de la lluvia caída, es otra cosa.
Me parece que sería bueno que los periodistas, de una tendencia ideológica u otra, dejen de lado fundamentalismos para avanzar en el diálogo necesario con la opinión pública de la cual son en gran parte responsables. Es claro que la información y la generación de noticias es hoy en día una herramienta importante en las construcciones políticas de uno y otros bandos pero considero que los profesionales de los medios deben priorizar su función de comunicadores y dejar la política (a la partidaria me refiero) a los políticos.
Dicho esto, entonces, me permito sí hacer una sugerencia al Jefe del Gobierno de la Ciudad:
Mauricio, la ciudad, que iba a estar buena, también debería estar limpia. No digo que con un servicio eficiente de recolección no nos vamos a inudar, pero todo podría ser menos asquerosito.

martes, 16 de febrero de 2010

El gran diario argentino?

Resulta que ahora, según un informe publicado en Clarín, la prensa oficialista se mueve de manera organizada a través de blogs. Es decir, un blogger que considera positiva alguna acción del gobierno sería sospechado de pertenecer a dicha organización.
Me parecen increíbles la cantidad de falacias que se utilizan para desprestigiar cualquier opinión que no coincida con la publicada en los medios comunicacionales hegemónicos.
¿Es que la única información desinteresada es la de Clarín?

jueves, 11 de febrero de 2010

Inflada con la inflación

Estoy harta de ver titulares apocalípticos sobre la escalada inflacionaria. De hecho, desde que tengo uso de razón pareciera ser que la inflación es una de las cuestiones que nos va a llevar al fin...pero en fin, aquí seguimos.
Por otra parte, y haciendo memoria, el único periodo que recuerdo como estable (en cuanto a inflación se refiere, eh) es la década del '90 con Carlitos a la cabeza y los dólares a los pies (¿o era al revés?)
Investigando un poco, y que conste en actas que mi única aproximación a la Economía fue en la cursada de dicha materia en el CBC hace muchos años, descubrí que lo que motiva la inflación no es necesariamente un estado terrible de cosas.
A ver.
"La inflación es el aumento generalizado del nivel de precios en los productos, bienes y servicios del mercado." (http://www.definicionabc.com/economia/inflacion.php) lo cual deviene en un menor poder adquisitivo de quienes compran.
Ahora bien, ¿Ustedes sabían que la inflación puede producirse cuando la demanda agregada crece por sobre la oferta?
Es decir, si un grupo de personas (podría hablarse de pueblo) gana más y en lugar de ahorrar decide consumir más, también se puede generar inflación. Pero ojo ( si alguno de Ustedes piensa diferente o sabe algo del tema por favor desasnénme), el consumo debe ser dentro del mercado interno si no la inflación no se refleja en los precios de productos de manufactura nacional; el consumo y precio de productos exportados está regido, si bien por la misma ley, por otras variables.
Otra: Si hay más inversión extranjera también puede generarse inflación, ya que hay más líquido circulando.
Y la última: la reducción del súperavit fiscal, tradicionalmente por un aumento de la emisión monetaria, y raramente (agrego yo) por la decisión política de darle una jubilación a quiénes estaban marginados del sistema ( no sé, qué loco, quizá las amas de casa) o un subsidio a los más vulnerables; eso también puede generar inflación.
Ahora, me pregunto yo, ¿cómo habrá hecho Menem para no generar inflación? Porque él lo hizo.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Un comentario, sobre la construcción de opinión, de una seguidora (les cuento que varios opinan pero les cuesta dejar los mensajes en el blog y los envían por mail, ya veremos cómo hacemos para poder compartirlos) me dejó pensado.
¿Con qué herramientas cuenta una sociedad para colaborar con la construcción de opinión individual?
¿La escuela?
En principio, y sin intención de desmerecer la importancia de la educación básica como elemento de superación de las sociedades, considero que la escuela como institución es uno de los basamentos para reproducir un sistema más que para cuestionarlo.
¿Los medios de comunicación masiva?
Siempre y cuando no sean monopólicos y respondan a intereses plurales son un camino.
Sin embargo no creo que la pluralidad sea la única condición para que los individuos generemos opinión. Creo que una cuestión importante es el desafío. El famoso nivelar para arriba me parece oportuno.
Cuando la noticia, tomada desde cualquier punto de vista, me la venden "masticada", sin necesidad de reflexión o polémica, sin resquicios para el cuestionamiento (aunque se base en falacias) automáticamente, y casi por naturaleza, asumo una posición de comodidad.
Y es justamente la comodidad una de las principales taras para pensar. Las noticias, la información en general tiene que ser clara pero incómoda. Un discurso con un lenguaje llano puede sin embargo dejarme puntos para que yo resuelva solita.
¿Ustedes qué piensan?

martes, 9 de febrero de 2010

Pago Difícil -Crítica Fácil

Ayer, cuando llegué a la cola del Pago Fácil de Belgrano, adelante mío, había una pareja de ancianos. Muy paquetes ellos, se notaba sin embargo cierta dificultad en el hombre para mantenerse parado. De manera inmediata, entonces, les ofrecí guardarles el lugar para que ellos tomasen asiento.
Una vez avanzada la cola, ya dentro del local, la señora retomó su lugar y empezó a darme charla:
- Es increíble, hay cola en todas partes.- me dijo.
-Sí, yo vengo del Francés y tardé más de media hora. Pero Ustedes, Señora, tienen derecho a que les cobren sin tanto lío ¿Por qué no se acerca a la ventanilla 5? Creo que es ahí donde se cobra a embarazadas y gente con movilidad reducida.
-¿Te parece, querida? A mí me da no sé qué, mirá si me retan.
-Bueno, si la retan que se la aguanten. Es su derecho.
-¿Vos sabés que quisimos pagar Fibertel en Fibertel y nos dijeron que no. Que sólo cobrarban con tarjeta.
-¡Qué bárbaro!
-¿Viste? Antes no te aceptaban la tarjeta en ningún lado y ahora...No, si está todo mal, también, con este gobierno...
En ese punto estuve tentada de contestarle a la Señora que "que tenía que ver el Gobierno con cómo cobra Fibertel o con la cola de Pago Fácil", pero vi que era insensato discutirle a una persona mayor, y que además el lugar no era propicio ya que la susodicha cola es un eco permanente de lugares comunes. Más bien preferí insistirle a la mujer para que pagase por la ventanilla 5 (cuestión a la que accedió, finalmente pagó y retribuyó mi consejo con un beso en mi mejilla y un "sos encantadora, querida"), arrastrando mis pies en esa cola interminable, como imagino arrastrarán sus patas las vacas al matadero, mirando hipnotizada la pantalla sin sonido de un televisor sintonizado en TN.
¿Ustedes, qué hacen en las colas de pago de impuestos?

jueves, 4 de febrero de 2010

Desde tempranísimo

Me desperté "Tempranísimo" escuchando a Magdalena Ruiz Guiñazú por la radio y ya me deprimí. Aunque llovió y bajó la temperatura parece que el alerta naranja se puso rojo incandescente.
La verdad es que no termino de acostumbrarme a que la mayoría de los periodistas de reconocimiento vean todo mal. Hoy, el tema en cuestión es la remoción de Redrado y su reemplazo por Marcó de Pont en el Banco Central. Magdalena, según sus propias palabras está "preocupadísima".
¿Cuántos de nosotros, más allá de la bajada mediática, puede decirse en condiciones de evaluar las decisiones macroeconómicas, la actuación de Redrado, el potencial de Marcó de Pont o las funciones del Central?
O mejor, ¿cuántos de nosotros estamos en condiciones de valorar los conocimientos de Ruiz Guiñazú con respecto a estos temas?
Muchos de los periodistas que se muestran preocupados por la economía actual son los mismos que avizoraron esperanzados el regreso de Cavallo al Ministerio de esa cartera en el 2001. Con esto no digo que todos y cada uno no tenemos derecho a preocuparnos y emitir opinión con respecto a lo que sucede. No. Lo que digo es que los periodistas, comunicadores sociales, tienen además la responsabilidad de pesar cada una de sus palabras porque la gente, la tan mentada opinión pública, en este país donde hace no tanto pedimos que se vayan todos los políticos, les creen ( a los periodistas, digo). Además hay otra cuestión, y es que en el mundo en el que vivimos la realidad ya no es la nuestra, la más inmediata, si no la que nos muestran los medios de comunicación. La famosa realidad mediatizada nos hace escuchar al meteorólogo de turno en lugar de salir al balcón para decidir si nos llevamos la camperita.
Después de la última dictadura fueron juzgados particulares e instituciones, incluso algunos sectores de la sociedad civil hicieron un mea culpa haciéndose cargo de la parte que les toca (se puede pecar por acción u omisión); los únicos, y digo los únicos, que jamás fueron juzgados ni judicialmente, ni socialmente fueron los periodistas. Y siguieron opinando.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Los secretos

Nominaron "El secreto de sus ojos" al Oscar a mejor película extranjera.
Campanella y sus films siempre me conmueven, sin embargo "El secreto..." no fue la que más me gustó. Será que el reflejo de esa gente con buenas intenciones, con ánimo de justicia, que no obstante decide infringir la ley no me terminó de convencer. La justicia se convirtió en castigo y el castigo en venganza.
Más allá de todo esto, debo decir que sí coincido totalmente con la subtrama, esa que nos muestra lo perjuicioso de lo "no dicho": el pibe que no dice que quiere a la piba y la viola y asesina, el otro que no le dice a su jefa que muere por ella y deja pasar los mejores años de su vida en medio de la frustración, el marido de la víctima que ya no habla de venganza pero la lleva a cabo.
De hecho, esta me parece la moraleja: la venganza consumada es justamente la condena al silencio. Un terrible castigo para cualquier ser humano, que nos definimos no sólo en función de lo que somos si no, básicamente, en función de lo que hacemos y decimos con y para los otros.
Por eso este blog: digamos.

martes, 2 de febrero de 2010

Tráfico

El expresidente, Néstor Kirchner compró 2 millones de dólares durante el 2008. Al matrimonio presidencial también se lo acusa de la compra de terrenos fiscales a precios bajísimos pero de un valor importante dada su ubicación estratégica.
Los Kirchner, abogados los dos, y el Jefe de Gabinete Aníbal Fernández sostienen que estas inversiones fueron realizadas de modo absolutamente legal. A mí no me cabe ninguna duda ¿Para qué transgredir la ley si uno puede incluso beneficiarse de ella?
La cuestión, y creo que esa es la verdadera discusión, es el tráfico de influencias ¿Hasta dónde un funcionario público debería poder utilizar la información privilegiada a la cual tiene acceso para beneficio propio?
Mi pregunta, de todas maneras, va más allá: ¿Hasta qué punto puede la ciudadanía exigir a sus funcionarios lo que ésta no realiza por sí misma? Nuestros políticos y gobernantes no vienen de Marte - aunque a veces eso es lo que parece- si no que emanan de "nosotros" mismos.
¿Qué tal si giramos 180° nuestras expectativas para hacerlas más realistas? ¿Por qué no empezar por nosotros mismos, en lugar de esperar del otro ( o los otros, como en este caso) para iniciar el cambio?
No sé, digo, tal vez es un camino para salir de este atolladero.

lunes, 1 de febrero de 2010

Avatares de esta vida

El sábado vi "Avatar". Más allá de mi opinión sobre la peli (una más del montón), me dejó pensando en la insistencia de la industria cinematográfica, primero, y de algunos exponentes -los mejores- de las sociedades después, en la búsqueda de la justicia.
En las películas se resuelve fácil: el malo, que siempre tiene algo de estúpido, a la larga pierde. En cambio en la vida real la cosa es bastante diferente; en principio porque nos cuesta distinguir a unos y a otros y en segundo lugar, una vez definido el qué o el quién representa al mal, no resulta simple vencerlo entre otras cosas porque de estúpido no tiene nada.
Enla naturaleza, por su parte, que entiende de equilibrio pero nada sabe de justicia, desde que el mundo es mundo el pez grande se come al pez chico y el sol sigue saliendo como si nada.
El Estado humano, entonces, viene a ajustar este detalle de la Madre Naturaleza, intentando implementar justicia.
No sé Ustedes, pero lo que es a mí no me parece que haya logrado mucho, y como ejemplo que baste un botón: EEUU invadió Irak con la excusa de que este último tenía ogivas nucleares (cuestión que finalmente tuvo que desmentirse rotundamente) e instaló una guerra que todavía se resiste a terminar. Los demás países (algunos) se quejaron (un poco) pero dejaron que las cosas siguieran su curso.
En el Estado Humano, a mi entender, el pez grande se sigue comiendo al pez chico pero antes se lo culea.
Y de equilibrio, ¿cómo andamos?

viernes, 29 de enero de 2010

Okinawa

En la contratapa del Página12 de hoy, Juan Forn habla sobre un escritor japonés, Kenzaburo, y los ejes temáticos de su literatura (http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-139204-2010-01-29.html). Uno de ellos me llamó particularmente la atención: Okinawa.
Resulta que hacia el final de la Segunda Guerra Mundial y a punto de perder su hegemonía sobre Okinawa ante las tropas estadounidenses, el ejército imperial japonés promovió la idea del suicidio como la única salvación entre los habitantes. Algunos la acataron sin chistar, mientras que otros tantos (especialmente las mujeres y los niños) la resistieron y entonces los hombres, sus hermanos, padre e hijos, aquellos que se suponía debían cuidarlos, tomaron la decisión por ellos y los asesinaron.
El episodio pasó a la historia como el "suicidio en masa de Okinawa", título (al suicidio me refiero) por demás arbitrario considerando que esa gente, tanto los que efectivamente se suicidaron como los que fueron asesinados y los que mataron a sus seres queridos, no tomaron esta decisión libremente.
Decidir, sin embargo, y valga la paradoja, es un acto de libertad.
¿Qué responsabilidad, entonces, le vale a los otros (cualquiera: el Estado, los Gobiernos, los medios de comunicación, nuestros jefes, maridos, esposas, etc.) sobre algunas de nuestras decisiones?

jueves, 28 de enero de 2010

Enero

Estoy asombrada de no haberme asombrado por el "alerta naranja en Buenos Aires". Parece que ahora, si hace calor de manera sostenida durante Enero tenemos que preocuparnos.
La cuestión es que me asombró no haberme asombrado. Como ya no me sorprende encontrar otra plaza enrejada, ni me asombra que un estornudo en el colectivo sea tomado igual que una puteada a los otros pasajeros, o que los mosquitos se hayan convertido en el enemigo público n° 1.
¿Será que haber empezado mi adolescencia entre las primeras noticias sobre el SIDA me inmunizó contra el asombro a la desnaturalización de lo "más natural del mundo"?
Sin voluntad de hacer apología de la irresponsabilidad, sin embargo, no quiero dejar de expresar mi hartazgo sobre la época que nos tocó vivir.
Al final, tenemos que tomar sol con protector, no besar a los otros por si están incubando una gripe, coger con forro y hasta cagar sin apoyar el culo en la tabla, no sea cosa que nos agarremos una venérea.
Y Ustedes, ¿qué piensan?

miércoles, 27 de enero de 2010

Presentación

Hola!
Esto es Talleres Pensantes, un espacio para informarnos, intercambiar ideas y colaborarnos desde nuestras subjetividades en la cosntrucción de objetivos comunes.